En momentos en que se espera que la población de personas mayores de la Florida aumente significativamente en las próximas dos décadas, las autoridades estatales tienen que tomar medidas con los asilos que no respetan las reglas, clausurando instalaciones en que los pacientes han fallecido por abuso, imponer multas más fuertes a los que infrijan la ley y aumentar la calificación de los que dirigen los asilos, conocidos como ALF, indica un estudio de la Legislatura.
Michael Sallah y Carol Marbin Miller
El informe, dado a conocer por el Senado estatal, pide cambios fundamentales en la supervisión de los asilos, exhortando a los legisladores a mejorar un sistema estatal que no tiene los fondos necesarios, permite a los cuidadores trabajar con “capacitación inadecuada” y depende de un sistema “deficiente” de cumplimiento para proteger a miles de pacientes delicados.
“Hay que eliminar las manzanas prodidas y [las autoridades normativas] no lo están haciendo”, dijo la senadora Eleanor Sobel, demócrata por Hollywood y vicepresidenta de la Comisión de Normación de Servicios de Salud, que dirigió la investigación.
“La Dirección de Administración de Servicios Médicos (AHCA) necesita dar el paso al frente y realizar la función que les toca”, afirmó.
La publicación del proyecto interno es el esfuerzo más reciente de los lídres electos por reformar los ALF de la Florida, que han sido fuertemente criticados por permitir que algunos de los peores asilos permanezcan abiertos, a pesar de condiciones decrépitas y peligrosas.
El estudio, realizado por personal del Senado a lo largo de dos meses, fue provocado por una investigación de The Miami Herald en mayo que concluyó que decenas de pacientes vulnerables murieron de abuso y despreocupación en los asilos, a razón de casi uno mensual desde el 2002, y que las peores instalaciones seguían funcionando.
Entre las recomendaciones clave del estudio estuvieron: eliminar la discreción de la AHCA para reducir las penalidaes cuando los inspectores detectan los abusos más serios, como la muerte o lesiones serias debido a la falta de atención, y obligar a la entidad a tomar medidas más fuertes para cerrar asilos que no cumplen las normas.
“Los pacientes de los ALF pueden estar mejor protegidos si la discreción de la AHCA para negar, revocar o suspender la licencia se elimina cuando una instalación infringe las normas seriamente, como en los casos de muertes debido a falta de atención o negligencia en que la instalación tuvo responsabilidad”, indicó el reporte.
El informe también recomendó que se obligue a la AHCA a imponer multas fuertes, prohibir nuevos ingresos y suspender licencias cuando la negligencia presente una amenaza a la salud, la seguridad y el bienestar de los pacientes”.
Entre las conclusiones del informe
– La AHCA no mantiene las inspecciones al día en los 2,956 asilos ALF del estado —como lo exige la ley— ni tampoco cobra los suficiente a loa asilos para cubir el costo de las inspecciones.
– Por lo menos 23 estados exigen mayores calificaciones a los operadores de asilos an ALF —como títulos universitarios y cursos de gerontología— mientras que la Florida sólo exige un diploma de secundaria y 24 horas de capacitación.
Foto: Eleanor Sobel, senadora estatal de la Florida. Carl Juste / The Miami Herald. Read more: Aquí